Un sistema de protección contra incendios sin mantenimiento es como un coche sin revisiones: puede fallar cuando más lo necesite. La ley obliga a inspecciones periódicas, pero más allá de evitar sanciones, es una cuestión de responsabilidad.
¿Qué incluye un mantenimiento legal?
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Extintores:
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Revisión anual por empresa autorizada.
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Recarga cada 5 años o tras uso.
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Bocas de incendio (BIE) y hidrantes:
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Prueba de presión cada 12 meses.
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Comprobación de mangueras y válvulas.
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Sistemas de rociadores (sprinklers):
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Limpieza de cabezales para evitar obstrucciones.
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Simulación de activación semestral.
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Consecuencias del descuido
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Multas: Desde €1.500 por falta de documentación hasta €30.000 por riesgo grave.
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Invalidez del seguro: Las aseguradoras pueden negarse a cubrir daños si no hay mantenimiento registrado.
Beneficios de un contrato de servicio
Contratar un plan con Instalaciones Contra Incendios ofrece:
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Técnicos homologados.
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Alertas automáticas para próximas revisiones.
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Documentación en regla para inspecciones.
Conclusión
El mantenimiento no es un gasto, es una garantía. Proteja su inversión y a las personas con un servicio profesional adaptado al RD 513/2017.
